lunes, 14 de octubre de 2013

Replantear

Aquí estamos otra vez, reflexionando. Llevo días, quizás meses, sintiendo que no existe motivación ni ilusión en mi vida. No hablo de la ilusión de una pareja o la alegría que aporta la familia y los amigos sino, que me refiero, a aquella motivación que te sale desde el interior, que nace de lo profundo de tus entrañas y que es parte del motor de tu vida, una parte de lo que le da sentido.

Y aquí estamos otra vez, replanteándome de nuevo mi camino, mi profesión, mi modo y filosofía de vida... Hay quien lo llama la "pérdida de la creatividad". Si tu posees una habilidad y no la desarrollas adecuadamente o la/te la reprimen, esa habilidad va desapareciendo. Y claro, como todo lo que estaba y ya no, deja un vacío.

Y aquí estamos otra vez, buscando qué nuevo enfoque darle a mi vida y decidir qué camino escoger. Tengo claro que sigo manteniendo mi vocación hacia los demás pero, lo que tengo más claro aún, es que debo hacerlo de una forma que no me destruya.

Y aquí estamos otra vez, levantándome cada mañana con la determinación de volver a encontrar mi creatividad perdida, el brillo que le da a la vida, el calor que emana dentro y que aporta calidez, la seguridad y la confianza que te da saber con claridad que vives en felicidad plena.

Y aquí estamos otra vez, sabiendo que para que todo esto llegue, primero hay que limpiar las malas hierbas del jardín del interior de uno mismo.

Y, por supuesto, aquí estoy otra vez, dando esos pasos, creyendo y aprendiendo de la experiencia vivida. Sino, dejaría de tener sentido.

Gracias por leerme.